20/11/09

RESPONSABILIDAD SOCIOAMBIENTAL

Presentación hecha en la Pontificia Universidad Católica del Perú sobre Responsabilidad Social y Medio Ambiente a grupos de Alumnos interesados en la participación. La idea era motivar y hacer pensar un poco. La charla se desarrolló aproximadamente en 45 minutos y posteriormente estuvimos casi otros 45' hablando y discutiendo sobre varios temas. Los alumnos fueron muy participativos y les gustó la experiencia. Creo que hacer presentaciones en este tipo de instituciones paralelamente a las capacitaciones a agricultores, campesinos, etc. es positivo porque de dichas universidades salen las personas que manejarán el país en el futuro. Crear conciencia en estos ámbitos es indispensable para un mejor futuro sostenible.
Espero que se vea bien, a veces, al subir archivos al Scribd cambia muchas de las configuraciones, además mis presentaciones suelen ser casi exclusivamente imágenes, efectos y pocas palabras, así que tal vez no se vea muy bien en este formato.

Saludos.
Bruno



Responsabilidad Social y Medio Ambiente

18/11/09

Responsabilidad Socioambiental

Hola a todas y todos, en primer lugar, he estado de vacaciones el último mes y las últimas semanas poniéndome al día con trabajos, de ahí la escasez de publicaciones.

Hoy quiero escribir sobre la Responsabilidad Social, ya que estoy participando en una conferencia sobre este tema en la Pontificia Universidad Católica del Perú.


RESPONSABILIDAD SOCIAL

1. ¿Qué es? (Introducción)

La responsabilidad social implica no asumir una posición de indifierencia ante los problemas actuales, como son la pobreza, la desigualdad, inequidad, problemas ambientales y otros.

Para ellos, una serie de personas, instituciones y empresas han decidido que deben mejorar la calidad de vida de las demás personas a través de actuaciones personales o corporativas que permitan de forma directa o indirecta atajar las causas o los efectos de estos problemas.

El grado y la forma de participar en este tipo de actuaciones de responsabilidad social depende de muchos factores y, pese a que está regulado sólamente en algunos estados, es básicamente una decisión propia basada en las creencias personales, necesidades empresariales (no nos engañemos, gran parte de la responsabilidad social es publicidad pura y dura) o el grado de culpabilidad o responsabilidad que cada uno de nosotros sentimos debido a nuestro nivel de vida y las repercusiones que tenemos. Por ejemplo, hoy en día es difícil encontrar un aminera sin un área de responsabilidad social, ya que son empresas que dañan enormemente el entorno ambiental, económico, social y cultural y es por ello que por un lado hacen actuaciones para evitar sus efectos y apoyar a las poblaciones, pero en la mayoría de los casos estas actuaciones no son más que un lavado de cara, un compromiso legal, un burdo engaño o una campaña publicitaria. En otros casos, las actividades altruistas y filántropas se convierten en herramientas para evadir impuestos, como pasa en el caso de algunos supermercados que al tocar la conciencia de los/as compradores/as, ofrecen donar el vuelto de una compra (céntimos, generalmente) para donarlo a una organización de beneficencia. Si bien este dinero en su mayor parte suele ir a parar a estas organizaciones, en otras ocasiones es desviado. Pero lo más preocupante es que dichos supermercados presentan estas donaciones como donativos particulares efectuados con su propio capital, con lo que desgravan en Hacienda y reducen sus obligaciones fiscales. Hay que tener en cuenta que estos supermercados (así como las mineras con el canon, que es muy similar) al generar muchísimos ingresos, apoyarían más al país a través de un pago adecuado de impuestos que se inviertan eficientemente, que a través de estos donativos que además son engañosos ya que, si yo como consumidor exijo un recibo de mi donación para yo poder desgravar, estas empresas no me lo van a facilitar ( y si no, hagan la prueba) por lo que les estoy regalando mi dinero para su imagen, su evasión de impuestos, etc.

Al final, resulta que la responsabilidad social corporativa tiene muchos matices y hay que saber leer entre líneas para descubrir al lobo con disfraz de cordero. Es comprensible que el fin ultimo de una empresa es generar riqueza, a través de capital. Pero también entendemos que generalmente lo justificamos porque esta riqueza genera empleos de calidad, se reinvierte a través de impuestos en mejoras sociles, etc. Si alguno de ustedes ha vivido en el mundo fantástico de Lewis Caroll tal vez se crea ese discurso, yo, por el contrario soy más proclive a creer en dragones y elfos.

Bueno, para resumir esta idea, si una actuación "socialmente responsable" (incluyamos el medioambiente en la ecuación, que está "de moda") no es rentable, simplemente no se hace. Ojo, hay excepciones y conozco varias, de hecho una de mis recientes compañeras de trabajo estaba contratada por una empresa que creía en el trabajo que realizaba en Perú con comunidades de Cuzco. Habrá que ver cuál ha sido la realidad del trabajo y qué tanto ha creído el trabajo en ella, pero es un ejemplo de actuaciones desinteresadas, al menos hasta donde yo tengo conocimiento.

2. Tipos y oríges de la Responsabilidad Socioambiental

¿Por qué motivo alguna persona (física o jurídica) decidiría emprender actuaciones para ayudar a mejorar la vida de otras personas? Por cierto, que es menos común de lo que nos pensamos, al menos actuaciones desinteresadas, honestas, serias y efectivas son poco comunes.

Por un lado, como si de una enfermedad se tratase, nuestro síntoma de "ayudismo" agudo generalmente, crónico en ocasiones, grave en algunos momentos, o socialismo responsable o como se nos ocurra llamarlo, tiene una causa como si de un germen, virus o bacteria se tratase. Me quedo con germen que tiene connotaciones positivas.

Éste germen puede ser la ética que se nos ha inculcado: a mi mis padres me enseñaban a no hacer ruido al sonarme los mocos, pero también me inculcaron que mientras una persona en este mundo viva oprimida, toda la humanidad como una vivirá oprimida también, sólo que no todos tenemos la capacidad de verlo (por cierlo, luego me enteré que ésto ya lo decían Bakunnin, Engels y compañía).

Por lo tanto, mi ética, que ha sido alimentada por una vida dedicada a la cooperación, el desarrollo en diversos y paupérrimos entornos, me ha llevado a, por ejemplo, escribir hoy esto, fundar una asociación y trabajar en lo que hago. A otros puede llevarles a donar "2 centavitos" de la compra de un paquete de servilletas, un paquete de arroz y una barra de pan a una obra benéfica, no menos loable ni para nada menos respetable.

Otra cosa es la moral y aquí, advierto, puede que toque fibras sensibles. La moral va ineludiblemente unida a la religión (si no, sería ética), y es esta religión la que nos ha inculcado valores e ideas que ponemos en práctica diariamente, seamos o no religiosos, ya que nuestra sociedad tiene un carácter religioso intrínseco tras años de historia dominada por la fe. Por ejemplo, yo no soy católico, pero celebro la navidad y me siento culpable cuando digo que no soy religioso, pero no me ofende que otros/as me digan que son religiosos/as y esque la blasfemia ha calado hondo en todos y todas durante siglos.

La religión Católica, por ejemplo y por proximidad, claro hablaría de Budismo, Zaratismo, Islamismo, Taoismo o cualquier otra, pero temo meter más la pata de lo que lo voy a hacer a continuación. Como decía, la religíón católica nos habla de Dios (fíjense cómo lo pongo en mayúsculas) y nos dice muchas cosas sobre Él (otra vez, además hombre y blanco y con barba) y sobre cómo debemos actuar para estar en el buen lado de la balanza el día del juicio final, por así decirlo. Entre esas cosas están amar al prójimo, cumplir con algunos mandamientos que alguien insiste en decir que son los originales (debería haber más y otros, creo yo), etc. Una de las cosas que nos enseñan es a confesarnos. Algunos pensareis que estoy desvariando, pero no me voy por las ramas, esto está relacionado.
Nos hemos acostumbrado a ir los domingos a misa, confesar nuestros pecados y milagrosamente estamos absueltos, "ergo te absuelvo" hijo mío, luego nos sentios bien y para estar más a bien con Dios, dejamos una limosna en el cuenco de un pobre paisano que no tiene nuestra misma suerte. Eso si, no nos quitamos el abrigo de piel, ni nos compramos un coche más pequeño ni, por ejemplo aumentamos el sueldo a nuestros empleados quienes cobran una msieria en condiciones lamentables, total, no importa, nos podemos arrepentir, confesar, rezar un par de padres nuestros, aves marías, incluso la iglesia, desafortunadamente ubicada en la mayor parte de los eventos históricos al lado de los explotadores, asesinos, ricos (olvidand que Jesús dijo: antes podrá pasar un camello por el ojo de una aguja que un rico entrar al reino de los cielos) se inventó el sistema de bulas papales que podían comprar los ricos y poderosos y ya podemos sentirnos mejor.

¿Qué quiere decir esto? no es para nada un párrafo incitando a no creer o a dejar la religión, nada más lejos de la realidad. Si quieres y aprecias algo, lo mejor es criticarlo para mejorarlo y aprender de los errores del pasado. Pero lo que ha dado lugar es a que nuestra sociedad de origen Católico, Apostólico y Romano sienta la necesidad de, de vez en cuando dar limosna, lo que se traduce en actuaciones puntuales como apadrinar un niño, hacer un donativo, tener un área de responsabilidad social modestita, etc. Cosas que no son malas en absoluto, es mas gracias a la iglesia por ello, son muy buenas, pero responden a la moralidad que nos ha inculcado nestro entorno religioso y desafortunadamente, no van más allá de la necesidad imperante de expiar nuestras culpas cada domingo en misa, por lo que muchas de estas actuaciones no suelen ser muy duraderas, ya que, el sentimiento de culpa y la hipocresía pelean generalmente una dura batalla en la que la primera gana los domingos o días de guardar y la otra más a menudo.

Ejemplo a parte son grandes religiosas y religiosos, teólogos de la liberación y otras personas que usando la fe dedican su vida el bienestar de los demás (que no ajeno) sin por ello, y ojo, eso es importantísimo, repito, sin por ello exigir que a cambio las personas ayudadas se conviertan, practique, apoyen o adulen la religión del que practica el altruismo por ello. Las monjas que te dan de comer sólo después de rezar, los misioneros de conversiones, los curas de la conquista y demás, no son socialmente responsables sino religiosamente coherentes con sus propias creencias y sus métodos.

A parte de la ética y la moral, está el compromiso social y la legalidad. El compromiso social está relacionado con aquello de "trae un pobre a comer a tu casa por navidad" y ese tipo de actividades en las que para ser socialmente aceptados tenemos que realizar de vez en cuando actividades no egoistas, o que al menos parezca eso. También hay quienes dedicamos nuestra vida a esto y vemos con malos ojos a quienes no lo hacen (si, sucede) y por lo tanto no somos socialmente aceptados en nuestro entorno si no somos "responsables".

La legalidad es algo que pone sobre papel y vincula al estado en la responsabilidad social. Son pocos los sitios donde ya existen leyes que obliguen a empresas, particulares y a los propios estados a invertir en estas actividades, epro existen. Por ejemplo, el Reino Unido y su ley de cambio climático pionera en el mundo y puntera, los países que legalmente destinen un porcentage de su presupuesto a cooperación o leyes como la Ley de Responsabilidad Ambiental aprobada en España. Al final, la ley suele responder a un entendimiento de facto y tácito o costumbres que llegan a ser de obligado cumplimiento, es por ello que es de esperar que se llegue a contar con mayor legislación al respecto.


(continuará...)



Origen y Tipos de Responsabilidad Social: Corporativa/empresarial, personal, legal, consumidor, etc.

Opción de negocio: empresas y ONGs